Un 25 de
junio de 1975, se firmaba nuestro Convenio Colectivo de Trabajo (CCT). Es una
herramienta que conquistaron los compañeros que nos antecedieron en nuestros
lugares de trabajo, luego de años y años de lucha y organización, en el marco
del “Rodrigazo” y de una de las huelgas generales más grandes de nuestra
historia. Se trata del famoso 18/75, en el cual se regulan los derechos y
deberes de trabajadores y patrones (bancarios y banqueros), así como la
organización de la actividad laboral y todo aquello que tiene que ver con las
condiciones de trabajo.
Con el golpe
cívico-militar del 76, los CCT de todos los gremios (el nuestro incluido)
fueron desconocidos, para que los empresarios pudieran imponer sus propias
condiciones en cada actividad laboral. Al regreso de la democracia se derogaron
las disposiciones restrictivas sobre negociación colectiva aplicadas durante la
dictadura. Por lo tanto, en el
gremio bancario el CCT 18/75 es el convenio vigente.
Sin embargo,
conquistas como el sistema de categorías, los coeficientes y ascensos
automáticos por antigüedad son “ninguneadas” todos los días por los banqueros. En nuestro Banco Ciudad este
tipo de violaciones de la 18/75 están a la orden del día. Un ejemplo reciente nos lo confirma;
si revisamos el última acta paritaria firmada entre La Bancaria y la cámara
ABAPPRA, veremos que en el artículo 10 (donde se fijan los montos de la
gratificación por el Día del Bancario/a) se aclara: "En el caso de los
trabajadores del Banco Ciudad de Buenos Aires, en razón de la especificidad de
su estructura salarial...": ¿Cómo
es esto? ¿Qué tipo de grilla salarial especial tenemos en Banco Ciudad? Nada
menos que una grilla "bombeada", sin coeficientes por antigüedad y con
los coeficientes por categoría tirados a la baja en las categorías iniciales y
"engordadas" en las de los funcionarios y personal jerárquico. Esto
se consagró en la década del 90, en un acuerdo entre la dirección de nuestro
sindicato y la Administración de aquel entonces. Creemos fundamental retrotraer
esta situación para garantizar la plena vigencia de nuestro CCT en Banco
Ciudad.
Cada derecho
que conquistamos "en el papel" se aplica y se respeta en la medida en
que la fuerza colectiva de los trabajadores pueda imponerlo. Por eso es
importante dar la pelea en todos nuestros lugares de trabajo por organizarnos y
hacerlo valer. ¡¡Defendamos lo que es nuestro, no cedamos terreno!!
Ya no estamos en
Dictadura:
¡LUCHEMOS
POR EL CUMPLIMIENTO DEL C.C.T. 18/75!
